Vie, Abr 04 2014
Así inició el Festival Estéreo Picnic 2014

Este año, el Parque 222 abrió sus puertas para recibir a miles de melómanos para la quinta edición del Festival. En su primer día, algunos sonidos Indie, el baile y Nine Inch Nails fueron el centro de atención. La lluvia intentó robar protagonismo, pero no lo consiguió. Esta fue nuestra experiencia.

Por: Tata Rodríguez

 

 

 

 

 

La jornada comenzó en el Escenario Caracol con la agrupación bogotana Árbol de Ojos, que, con su sonido británico, influenciado por Rockabilly y Swing, atrapó a un público ansioso de Rock. Una banda, que en lo personal, no había tenido la oportunidad de ver en vivo desde hacía bastante tiempo y que me sorprendió por su crecimiento y madurez musical.

Para el momento en que Portugal. The Man subió a la misma tarima, el lugar estaba más lleno. Quienes asistimos a su presentación en Armando Records, la noche anterior, nos dimos cuenta de la increíble energía que la banda estadounidense contagia y arrastran; sin embargo, tan sólo fue un abrebocas de lo que vivimos durante su show en el primer día del Festival.

Las primeras notas de ‘Purple Yellow Red and Blue’, fueron suficientes para conectar con los asistentes y empezar a crear un memorable recuerdo en la mente de todos.

A pesar del chorro de agua que irrumpió en la tarima, a mitad de su presentación (dándonos a entender, de paso, la dimensión del aguacero que estaba cayendo), no fue excusa válida para que la gente abandonara su lugar o que decayera el ánimo.

Poco tiempo después fue el turno de Julian Casablancas, quien se presentó en el Escenario Tigo, muy a las 7 pm y bajo una lluvia que no pretendía irse. En su show (un adelanto de lo que veremos en su segundo trabajo como solista), el líder y vocalista de The Strokes apareció junto a su nueva banda de apoyo The Voidz.

‘Ego’, canción que ha sido la encargada de abrir sus conciertos en esta nueva etapa, nos dio a entender que la distorsión, la suciedad y el descontrol son parte vital de su propuesta, la cual, claramente no es apta para todo público.

Quienes no hemos seguido de cerca esta fase de Casablancas, nos mirábamos confundidos, ya que no le encontrábamos coherencia musical a lo que escuchábamos; sin embargo, fue curioso ver rostros extasiados entre el público asistente. El mejor momento de su presentación fue ‘11th Dimension’.

En el otro escenario, las cosas eran diferentes. Dorian, agrupación oriunda de Barcelona, se apoderó del lugar gracias a esaintención de integrar el sonido característico del Pop español con la Electrónica y el Indie; coctel rockero que fue bien recibido, aplaudido y apoyado por aquellos que estaban en la carpa, sea disfrutando de esta propuesta o huyéndole a la lluvia.

Mientras el lugar se llenaba para saltar y bailar al ritmo de Capital Cities; nosotros preferimos ver a Adrian Dárgelos y a sus Babasonicos. La agrupación argentina hizo desaparecer el frío post lluvia gracias a sus ya conocidas canciones incorrectas y las que presentó en su último trabajo discográfico ‘Romantisísmico’, dejando claro porque es una de las bandas favoritas en Colombia y en Latinoamérica.

A las 10 pm, en punto, Nine Inch Nails llegó al Escenario Tigo, descargando su potente sonido industrial acompañado por un juego de luces y una propuesta visual, que secundaron a la banda liderada por Trent Teznor y que, a la larga, tomó un rol importante durante la hora y media de concierto.

Con los sonidos hipnotizantes de ‘Copy of A’, ‘Wish’ y ‘Letting You’, la agrupación nos permitió entrar a su mundo y comprender esos demonios, emociones y pensamientos que quieren exorcizar. A partir de ese momento, la adrenalina fluyó de inmediato, incluyendo los momentos en los que Reznor quería llevarnos por nuevos horizontes.

‘Piggy’, ‘The Warning’, ‘Dissapointed’ y‘Sanctified’ atraparon nuestros sentidos, dando pie a otras canciones como ‘Hand Covers Bruise’ y las muy conocidas ‘The Hand That Feeds’ y ‘Head Like a Hole’, de las más cantadas durante la presentación.

Aunque los asistente tuvieron la esperanza hasta el último minuto de escuchar ‘Closer’ o ‘Hurt’, éste, sin duda, es uno de los mejores shows que los colombianos hemos tenido la oportunidad de presenciar, en estos últimos años.

Cuando pensábamos que el primer día del Festival había superado nuestras expectativas, Phoenix nos regaló una gran fiesta como cierre de esta jornada. Ni un alma cabía en la carpa del Escenario Caracol cuando los franceses se apoderaron de la tarima.

Bajo la batuta de Thomas Mars, quien aprovechó un par de ocasiones para hacer “crowd surfing”, la agrupación nos hizo bailar a todos con sus canciones rítmicas y contagiosas, incluyendo a aquellos que iban saliendo del parque y a otros tantos, que simplemente no querían marcharse.